Cartas Del Ingeniero Trevor

Bien para empesar la convercacion pondre las cartas del ingeniero trevor el creador y contructor de la mancion Spenzer

Las Cartas Del Ingeniero Creador De la Mansion SpencerRaccoon City, ciudad situada en la zona oeste de América. Oculta en mitad de un frondoso bosque que rodea el monte Arklay, en las afueras de la ciudad, existe una mansión, extrañamente tranquila.
El 13 Noviembre de 1967 la figura de un hombre se proyectaba frente a las puertas de la mansión. Era George Trevor, famoso arquitecto venido de Nueva York, que había diseñado aquel lugar de la nada. El dueño de la mansión, Ozwell E. Spencer, lo invitó a él y a su familia con motivo de agradecerle el nivel de perfección exhibido durante su labor. Saturado por su trabajo, Trevor inicialmente invitó primero a su esposa Jessica y a su hija de 14 años Lisa a visitar el hogar de Lord Spencer, más tarde él se unió a ellos. Desgraciadamente, cuando Trevor alcanzó su destino final, no halló rastro alguno acerca del paradero de su esposa e hija. Trevor también desapareció, como si la mansión entera y sus secretos les hubieran engullido por completo.
¿Qué fue de ellos, por qué desaparecieron?
El siguiente extracto procede de un pequeño diario escrito mientras Trevor estuvo alojado en la mansión. Spencer pagó una fortuna por aquel edificio. Solo su construcción ocupó cinco años de la vida de Trevor. ¿Por qué le dedicó tanto tiempo? ¿Sabía Trevor que treinta años después otros extraños sucesos tendrían lugar en aquella misma mansión? Creo que este pequeño diario es la pieza clave para entender en parte el origen de tales misteriosos sucesos.

Invitación 13 de Noviembre de 1967
Tras terminar mi trabajo y haber abandonado Nueva York, finalmente he llegado a la mansión aprox. a las seis de la tarde. El recibidor es muy espacioso. Las escaleras centrales que conducen al segundo piso son realmente impresionantes. Contemplar la arquitectura que me rodea no hace más que la nostalgia me invada de nuevo. Diseñar los planos en que se basa este lugar es el trabajo que más me enorgullece. Desde el día que mostré el modelo a Ozwell E. Spencer reunidos en su oficina, hasta la finalización del edificio, han transcurrido cinco años de una dedicación total por mi parte. Las órdenes de Spencer fueron difíciles de seguir y tuve que hacer acopio de toda mi energía e ingenuidad para llevarlas a cabo. Primero no detecté ningún suceso sospechoso, fuera de lo común. Mientras, él se volvió hacia mí. Lord Spencer se acarició levemente la cabellera blanca que se asomaba por encima de sus hombros. Su estatura era imponente, a primera vista, uno tenía la sensación de que él tenía un alto nivel de confianza en sí mismo. Inicialmente él me dijo que mi esposa Jessica y mi hija Lisa volvieron a visitar a su tía Emma, que estaba enferma. Nosotros éramos los únicos que conocían al detalle los numerosos secretos ocultos que contenía aquel edificio. Satisfechos por la complicidad que nos unía, saboreamos una copa de vino.

Banquete El comedor es alucinante. Hay una extensa variedad de comida repartida de forma exquisita, armoniosa encima de una larga mesa de madera de mahogany. Si alguien levantara la mirada, vislumbraría en lo alto de la segunda planta, la estatua de una diosa desconocida, modelada al estilo "Rodin". Su anatomía simétrica, muerta, y su turbadora mirada de deseo. Pero que los curiosos se despidan de contemplar tal espectáculo en su máximo esplendor, el banquete es exclusivo para el disfrute de dos invitados (Spencer y yo). El rítmico tic tac de las agujas del reloj, es el único sonido que llega a mis oídos. Ahhh, si solamente Jessica y Lisa estuvieran aquí! Deacuerdo con Spencer, ellas llegaron tres días antes que yo y les encantó la casa. En especial Lisa se benefició en particular de la amabilidad de Spencer y se le permitió tocar el piano en primicia respecto a los demás. Ella fue reconocida sobre todo por tocar la "Moonlight Sonata" de Beethoven (Su especialidad). En aquel anochecer de luna llena, su melodía parecía llegar hasta el satélite que orbitaba encima del bosque que envolvía la casa, Spencer se congratulaba junto a mi esposa por vivir un momento tan soberbio. Puedo imaginarme sus dos rostros como se iluminaban de placer.

Sospecha 14 de Noviembre de 1967
El señor Spencer me guió por los corredores de la mansión. Él abrió las puertas de varios cuartos. En los cuartos habían obras de arte de valor incalculable: cuadros de Da Vinci, esculturas de Raphael... Observé que una de las habitaciones contenía la estatua de piedra de una fiera, cuyos ojos parecían piedras preciosas. En otra, armaduras de caballeros habían sido alineadas de modo que rendían tributo a su capitán. Todas aquellas piezas las recolectó Spencer con el paso del tiempo. No en vano, presumía de ser uno de los hombres más ricos del mundo. "¿Le gusta? Deseo utilizar esta residencia como una sucursal, para una nueva compañía. La he previsto, no solo para los empleados, también para que mis huéspedes puedan utilizarlo." Su proyecto era diseñar una compañía internacional de carácter médico. Me dijo que llamaría a su empresa "Umbrella". Me pregunto por que oculta tantos secretos en la mansión. Él puede decir que desea crear una sucursal para su empresa, pero tanto secretismo me parece exagerado. Incluso en el caso que su acciones sean consecuencia de la pasión desmedida que muestra en lo que respecta a su trabajo.

18 de Noviembre de 1967
Mi familia no ha vuelto todavía. "¿Tía Emma sigue enferma?" Lo dudo. El teléfono no está instalado, que no es muy conveniente. Salí a la terraza del segundo piso, necesitaba aclarar mi mente. Los cuervos cogidos en la barandilla, me miraban fijamente mientras graznaban. Tuve una intuición oscura. Tengo continuamente la impresión de que me observan...vi. una cosa asombrosa en un pequeño cuarto. Hay una escalera que conduce a un pasadizo subterráneo enmascarado por una cascada de agua. "No es obra mía. ¿Cuándo fue construida?" Mientras me lo preguntaba, aparecieron tres hombres ataviados con una bata blanca. Parecían nerviosos."¿Quién es usted? Usted no puede recorrer libremente esta zona."

Duda 21 de Noviembre de 1967
Recogieron mi equipaje y alguien me condujo a un cuarto grande, sin aperturas, en la primera planta reservada para las recepciones. Al no haber llegado el señor, me dedicaba a observar los cuadros que había a mi alrededor en compañía de un hombre con una bata blanca. Él era uno de los tres hombres desconocidos que vi en el patio. "La vida es rica y corta". En las pinturas de la pared, se representaba el paso del tiempo de forma muy gráfica, desde su nacimiento a su muerte. "Su familia ha muerto, ahora." Me dijo el hombre de la bata blanca. El tiempo pareció detenerse. ¿De qué diablos estaba hablando? Entonces recibí un fuerte golpe en la cabeza y me desplomé perdiendo el conocimiento.

Primera Detención 24 Noviembre de 1967
¿Cómo podía él convertirse en esta clase de persona? ¿Qué sucedía aquí? ¿Y cuál era el objetivo de su compañía llamada Umbrella? Me encarcelaron en la habitación y el tiempo transcurría lentamente. "El objetivo es mantener el lugar en secreto. Y puesto que usted es un desconocido..." Un día, vino otro tipo con una bata blanca para traerme comida. ¿ Qué secreto es más importante que una vida humana? Solo Lord Spencer y yo, conocemos los secretos de su mansión. Si yo muero, él será el único. ¿Es por ese motivo por él que esas horribles criaturas se arrastran pesadamente por los pasillas de la casa? No me quedaré aquí, corriendo el riesgo a ser devorado o algo peor. Debo escapar de mi encierro. La cuestión es si desde el principio diseñé lo que debía ser mi propia tumba. Cuando ideaba la estructura del hogar de Spencer, de acuerdo con la extraña fascinación por los enigmas de mi cliente, concebí una manera de escaparse para quienquiera que se encontrara encarcelado allí. Quien sabe si Lord Spencer deseaba probar la eficacia de aquel lugar conmigo... Entonces una de las incontables criaturas que infestaban el suelo y el techo, cayó sobre mí e intento trepar por mi cuerpo. Por una razón desconocida, parecía atraerlas. Salté de forma instintiva hacia atrás a la vez que me levantaba y comencé a pisotearlas. ¿Qué eran? ¿Arañas?
27 de Noviembre, 1967
Finalmente he logrado escapar de la habitación. Pero nadie abandona este señorío si no usa la cabeza. Necesitas los blasones, el ojo que le falta a la estatua del tigre y el emblema de oro. ¡No me ocuparé de buscarlos! No puedo perder más tiempo.

Segunda Detención 27 de Noviembre de 1967
Me faltan palabras para describirla. Una planta, absurdamente gigantesca, ocupa la habitación entera. Dios no puede haber creado tal monstruosidad.
30 de Noviembre, 1967
No hay salida. Es imposible escapar. Hay un laboratorio fantasma que conduce a una cueva subterránea oculta a primera vista. He conseguido encontrarla. Veo unos zapatos de tacón alto. Un nombre me viene a la memoria, Jessica. ¿Compartiré el mismo destino que mi esposa e hija? No, escaparé a cualquier precio, como ellas han hecho antes que yo.
Desesperación 5 de Diciembre de 1967 Mi garganta se deshidrata. Llevo días sin comer y desconozco por cuanto tiempo me obedecerán mis músculos. Creo que estoy enloqueciendo. ¿Por qué? Por que soy como una rata de laboratorio tratando desesperadamente de hallar la salida de un laberinto. ¿Mi fascinación al idear aquel lugar debió ser enfermiza?
7 de Diciembre, 1967
Estoy en un conducto secreto subterráneo oscuro y mojado. Ante mí se alza una figura escalofriante que me bloquea el paso... excavo con mis uñas sangrantes, descarnadas, el último tramo de tierra restante que me separa de la figura. Es una enorme lápida de piedra, con un nombre gravado en ella. ¿Qué clase de psicópata sería capaz de hacer algo así? ¿"George Trevor", ese soy yo? Spencer calculó desde el principio, que en mi empeño por escapar iría a parar hasta aquí donde expiraría mi último aliento de vida, y preparó mi tumba. Realizó con éxito su experimento, dejando pistas falsas, alejándome del camino correcto. Jessica, por favor perdóname. Pronto... nos reuniremos los tres en el paraíso.
Escrito por George Trevor
Sucesos Cerca De la Mansión Spencer
Descubren un tren accidentado en medio del bosque y no se sabe las causas, alrededor se encuentra la Mansión Spencer.
Extrañas y bizarras muertes han estado ocurriendo en las montañas cercanas a Raccoon City (montañas Arkay), y los S.T.A.R.S. (Special Tactics And Rescue Service) son enviados a investigar los sucesos. Después de perder el contacto con ellos se decide enviar al equipo Alfa para averiguar que había ocurrido con el equipo anterior. Al llegar al lugar, y descender de su helicóptero para revisar una extraña humareda, son atacados por una jauría de perros. Uno de sus compañeros (Joseph Frost) muere en el lugar. Dadas las circunstancias el piloto del helicóptero, Brad Vickers, huye en éste, mientras los otros (Albert Wesker, Jill Valentine, Chris Redfield y Barry Burton), corren a refugiarse a una mansión cercana, donde deberán averiguar que ha sucedido en ese macabro.

wow bkn! no lo sabîa esta super sigue asi!

Gracias por algo me tomo el tiempo de recopilar informacion muy importante!

hey!
yo no escribi eso
me cambiaste los mensajes
xD




no broma me cai la zorra luffy...
....y el viernes al cole


y no se olviden de ke el viernes es el cumple del Ampi
llamenlo o los golpeo xD

bueno xao

xd emm...... sii los edite x muxos garabatos zii toii ablando cn ell wn no nos avisaste ke ibamos a iir al ciine wnoo esto no espara eso asii ke nos vemos xao!

Resident Evil: La realidad de la mansión Spencer
por: Junior Farias


RESIDENT EVIL: LA REALIDAD DE LA MANSION SPENCER

Autor: Junior Farias (Equipo de investigación y desarrollo)



EL INFIERNO COMIENZA



Capitulo I: Bienvenidos a Umbrella

Un helicóptero con el escudo de Umbrella sobrevolaba Raccoon city, dentro del helicóptero se encontraban en especial 2 personas; la primera, el mismo Albert Wesker, con sus eternas gafas de sol y su frío rostro. La segunda, Birkin, el llevaba una bata de laboratorio, un pantalón azul, zapatos negros, una camisa blanca y una corbata roja.

El helicóptero entró en la zona del bosque mientras Wesker miraba por la ventana y pensaba en porque alguien quisiera desarrollar un virus en una zona con tantos seres vivos, deberían hacer sus experimentos en un lugar en el que no hubiera vida, pero no, pusieron las instalaciones en medio de tantos seres vivos, parecía que en cualquier momento el virus se podría soltar y contagiar a toda la población de Raccoon. Pero después de todo esa no era su responsabilidad; apartó su mirada del bosque y dirigió la vista hacia Birkin quien miraba sus notas. -Birkin- dijo Wesker en tono de burla -¿porqué siempre estás mirando tus notas?- con una sonrisa en el rostro, Birkin le respondió -es parte de mi trabajo-.
A lo lejos ya se divisaba la mansión, el piloto dirigiéndose a ambos dijo -llegaremos pronto-. Unos minutos después el helicóptero aterrizó en el helipuerto, bajaron del helicóptero y un sujeto que al parecer era un científico los recibió, el sujeto usaba lentes y en lugar de cabello tenía una cabeza calva y brillante. -sean bienvenidos a nuestras instalaciones- exclamó el sujeto mientras con la mano señalaba el edificio- mi nombre es Sven Hederer, y estoy a cargo de las instalaciones, si me siguen les mostraré el lugar- concluyó Sven quién parecía ser un sujeto agradable.

Los tres bajaron por un elevador y llegaron a un pasillo muy iluminado en el que no había nadie, al final de éste había unas escaleras y abajo una puerta metálica, cruzaron la puerta la cuál los condujo hasta una enorme habitación, donde varios científicos y guardias de seguridad caminaban por el lugar, había seis puertas; dos a la derecha, dos a la izquierda, una al frente y una última atrás.
-les mostraré los experimentos que llevamos en este lugar, síganme por favor- dijo Sven, los dirigió a unas puertas de la derecha y entraron a un pasillo que en vez de paredes tenía jaulas de cristal donde tenían los experimentos -estás son algunas de nuestras creaciones, este es él MA-124 Cerberus, el cuál es un perro que ha sido transformado por el T-Virus, aumenta su agresividad, y este de acá es uno de mis favoritos, es el MA-121 Hunter, es uno de nuestros mayores experimentos lo conseguimos manipulando los genes de una rana, en resumen es mitad rana y migad gorila, son rápidos y mortales, pero esto no es lo mejor que tenemos, tenemos algo muy espectacular- mencionó Sven mientras caminaban por aquel pasillo, los llevó a una habitación dónde estaba una cámara de cristal, dentro estaba una muchacha con aspecto putrefacto, Wesker se quitó las gafas de sol, acercó su cara al cristal y puso una mano sobre este, Birkin dejó de mirar sus notas -¿qué es ésta cosa?- preguntó Wesker, -su nombre es Lisa Treyor, hija del arquitecto que diseñó la mansión, la usamos como conejillo de indias. Le hemos inyectado toda clase de virus y sigue con vida, pero ella no es nuestra mayor creación, nuestra obra cumbre es el Tyrant- dijo Sven, quién los llevó a otra habitación, dónde también había un elevador, entraron y bajaron por él.

Llegaron a una habitación con grandes incubadoras, dentro de una de ellas estaba el magnifico Tyrant, un ser muy grande con una garra en su mano izquierda -Es magnifico- mencionó Wesker -Estoy de acuerdo contigo Wesker- dijo Birkin, Sven dijo dirigiéndose a ambos -estamos orgullosos de lo que hacemos aquí, algún día usaremos esto para la guerra, bueno basta de presentaciones, les mostraré la mansión-. Concluyó Sven.


Capitulo II: La mansión Spencer

Los tres salieron de los laboratorios por un elevador, salieron a una especie de jardín que en el centro tenía una fuente -esa fuente es la entrada alternativa a los laboratorios, nunca la usamos, se entra por ahí poniendo las medallas del águila y del lobo, las dos las conservamos en la residencia donde llevamos a cabo algunos experimentos más sencillos, por aquí, les mostraré sus habitaciones- mencionó Sven, quién abrió una puerta de madera, la cual tenía unas escaleras muy largas, los tres las subieron y llegaron a una habitación de piedra, la cuál tenía un sarcófago -¿qué hay ahí?-preguntó Birkin, -ahí guardamos el cadáver de la madre de Lisa- contestó Sven.

Subieron por otras escaleras que los condujeron a una puerta de rejas, la cruzaron, ahora estaban en el salón principal caminaron hacia la derecha y entraron al comedor, era muy hermoso; tenía pinturas antiguas y un gran reloj de péndulo. Entraron por otra puerta que los condujo a un pasillo muy angosto, el cual estaba decorado con una hermosa alfombra, y tenía tres puertas, entraron por la puerta de en medio y llegaron a una habitación muy grande con dos camas -Esta será su habitación, espero que su estancia sea placentera- dijo Sven, después cerró la puerta y los dejó solos.

-Que opinas de todo esto Wesker- preguntó Birkin, Wesker contestó -no puedo quejarme- Birkin tomó sus notas y se puso a revisarlas mientras Wesker salía a dar un paseo por la mansión. Al salir al pasillo percibió una tonada muy relajante, era la música de un piano. Esto capto su atención y se dispuso a averiguar el origen de aquella musiquita. Siguió la música hasta que dio con una habitación, entró en ella y encontró un sujeto tocando el piano, en cuánto Wesker entró, el tipo dejo de tocar el piano y volteó a verlo -Disculpa, me llamo la atención la música, mi nombre es Albert- dijo Wesker, el tipo contestó -No importa, mi nombre es Jasón Myers, sabes Albert, esta mansión esconde muchas cosas- mientras mencionaba esto se puso de pie y se fue, al parecer Jasón sabía muchas cosas sobre Umbrella.
Wesker regresó a su habitación y se encontró con Birkin, quién estaba sentado frente a una computadora muy concentrado en lo que hacía -la mansión es muy grande, Birkin- comentó Wesker -bueno no sé como esté la mansión pero yo continuaré con mis investigaciones- respondió Birkin, Wesker se recostó en la cama y cerró los ojos.

Capitulo III.- El comienzo de la pesadilla

Ya había pasado una semana desde que Wesker y Birkin habían llegado a la mansión, los dos estaban trabajando en su habitación, ambos muy concentrados en su trabajo cuándo de repente entró Sven abriendo la puerta de golpe, lo cuál asustó a Wesker y a Birkin; Sven se veía muy asustado y nervioso -Me asustó Hederer -dijo Birkin -¿Qué pasa?, Porqué tan alterado- preguntó Wesker -no pasa nada grave, sólo tuvimos algunas fallas en los laboratorios, solo unos pequeños desperfectos, nada grave, pero por precauciones, mejor dicho, medidas de seguridad les vamos a pedir que no abandonen las instalaciones y que por el momento no entren a los laboratorios, por favor, quédense sólo en la mansión- explicaba Sven, quién por cierto se veía bastante alterado.

Wesker y Birkin sabían que Sven les había mentido, algo grave estaba pasando en las instalaciones, ellos dos no le tomaron demasiada importancia a lo que Sven les había dicho, pero Wesker era una persona muy curiosa así que salió a ver que pasaba, al salir al comedor vio que había dos sujetos que parecían soldados, portaban unas ametralladoras MAC11 -¿qué está pasando aquí?- preguntó Wesker a uno de ellos, quién le contestó -Tenemos algunos problemas en los laboratorios, pero vamos a solucionarlos pronto, bueno, nosotros nos largamos de aquí- los dos soldados dejaron el comedor, Wesker los siguió y se dio cuenta de que había mas soldados, todos estaban entrando al pasadizo que llevaba a los laboratorios; Wesker notó que antes de entrar, a cada uno de los soldados le ponían mascaras de gas.

Algo grave estaba pasando, Wesker se acercó a Sven quién estaba con los soldados.
-Dígame la verdad Hederer, ¿qué está pasando aquí?- preguntó Wesker molesto
-Ya le dije que nada grave, usted regrese a la habitación- explicó Sven. Sabiendo que no le sacaría mas respuestas, Wesker regresó a su habitación, de uno de los cajones, sacó una pistola -¿Qué piensas hacer?- le preguntó Birkin -Me largo de aquí- contestó Wesker -Ya escuchaste a Hederer, no podemos dejar la mansión- contestó Birkin -No me importa lo que diga Hederer- fueron las últimas palabras de Wesker antes de que dejara la habitación, llegó al salón principal, notó que ya no había ningún soldado; sólo estaba Sven, sin decir nada, Wesker abrió la puerta principal -¿Qué está tratando de hacer?- preguntó Sven, Wesker volteó y apunto su arma hacia Sven -No diga nada Hederer- dijo Wesker.

Salió al bosque, el bosque estaba repleto de neblina y daba un aspecto muy macabro, pero Wesker no sentía miedo, caminó tratando de encontrar una salida pero su búsqueda fracasó. En el camino escuchó el gruñido de un perro, volteó y vio que detrás de él estaba un cerberus, tenía la piel totalmente putrefacta y se notaba muy agresivo, entonces el perro saltó sobre Wesker, pero éste disparo casi instintivamente contra el perro haciéndolo pedazos al contacto del plomo con su cuerpo, despedazado, cayó el cadáver al suelo, Wesker se acercó lentamente al cadáver, se agachó, tocó la piel del perro y dijo para si mismo -¿Qué está pasando en este lugar?- en ese instante escuchó un gemido, se levantó, apuntó hacia todos lados, pero no alcanzó a distinguir nada entre la niebla, caminó lentamente, apuntando para prevenir cualquier cosa, mientras escuchaba el ruido de sus pies sobre la hierba, alcanzó a oír unos disparos de escopeta, Wesker corrió hacia donde escuchó los disparos y se encontró con Jason, quién disparaba a un no-muerto, un zombie. El zombie cayó al suelo -¿Qué es esta cosa?- preguntó Wesker, en ese momento aparecieron de entre la neblina otros cinco zombies, los cuáles parecían ser empleados de Umbrella, -No hay tiempo de explicar ahora, hay que regresar a la mansión- los dos empezaron a huir de los zombies, ya era visible la mansión; En el camino un cerberus saltó sobre Jason derribándolo, Wesker rápidamente pateo al perro y lo llenó de plomo, después miró hacia atrás y vio que eran siete zombies los que los perseguían -Rápido- apresuró Wesker a Jason, los dos corrieron hasta llegar a la mansión.

Capitulo IV.- Cena de Caníbales

Entraron y cerraron la puerta, Wesker notó que Sven ya no estaba -¿Qué eran esas cosas?- preguntó Wesker -Hederer no quería que comentara esto a ningún trabajador, pero no paso un simple accidente, paso algo grave, el T-Virus se derramo por todos los laboratorios, infectó a científicos y empleados, los experimentos escaparon, todo es un desastre, estamos condenados- dijo Jason -Primero hay que ir por Birkin, después veremos la manera de escapar- dijo Wesker.

Los dos se dirigieron a la habitación, pero Birkin no estaba -Tenemos que ir a los laboratorios, es la única manera de escapar, mandaremos una señal de rescate- explicó Jason -Muy bien- contestó Wesker. Se dirigieron al pasadizo que comunicaba a los laboratorios, bajaron las escaleras y llegaron a la habitación donde estaba el sarcófago de la madre de Lisa, el paisaje era desgarrador, la sangre bañaba el piso, cadáveres de soldados esparcidos por el suelo, zombies enfundados en batas de laboratorio esparcidos también, y para completar el cuadro, balas tiradas por todas partes.

Siguieron bajando, hasta llegar al jardín, trataron de abrir la puerta de metal, pero esta no abría, -Debieron sellarla por medidas de seguridad, existe otra entrada al laboratorio pero es por la fuente y ocupamos las medallas del águila y el lobo, pero no se donde están- dijo Jason -Hederer mencionó que las guardaban en la residencia, pasando el jardín, pero es muy peligroso cruzar- mencionó Wesker -Tendremos que arriesgarnos- dijo Jason. Mientras hablaban, no se percataron que un zombie se acercaba lentamente hacia ellos. Este repulsivo ser se lanzó sobre ellos, pero antes de que diera cualquier ataque, una bala se estrelló contra su cráneo aniquilando al monstruo, el sonido de la bala llamó la atención de Wesker y de Jason, ambos voltearon a ver su procedencia se dieron cuenta de que el que disparo fue nada mas y nada menos que William Birkin -Pensé que habías muerto allá afuera, Wesker- dijo Birkin -Y yo pensé que un zombi te había comido aquí adentro- contestó Wesker -Al parecer somos los únicos sobrevivientes, no sé como saldremos de éste lugar- dijo Birkin -Nosotros si- dijo Wesker -tenemos que retirarnos de éste lugar- dijo Jason.

Los tres salieron de esa zona, se dirigieron al salón principal dónde solo se escuchaban los gemidos de los zombis. Se dirigían fuera de la mansión, mataron uno que otro zombi en el camino, por fin llegaron a la puerta que los sacaría de la mansión, sólo tenía un problema, ocupaba una llave -Diablos, esta puerta ocupa la llave del emblema de la armadura- dijo Jason -¿Y dónde se encuentra esa llave?- preguntó Birkin -En el tercer piso de la mansión, en la habitación del señor Spencer, en una caja en su armario- dijo Jason.
-Yo iré por ella, iré solo, nadie me tiene que acompañar, sólo se necesita de una persona- dijo Wesker, pero antes de que éste se marchara, Jason le lanzó una escopeta -Por si las dudas- mencionó Jason al tiempo que sonreía.

Wesker llegó a salvo al tercer piso, se dirigió a la habitación del señor Spencer, se encontró una mujer muerta en el piso con un revólver en la mano, y a unos centímetros de ella, el cuerpo sin vida de un hombre; sin darle mucha importancia, se aproximó al armario, tomó la caja y trató de abrirla, pero esta no se abría, la arrojó contra el suelo, la caja calló con un ligero estallido y se rompió, tomó la llave y cuando se proponía a retirarse, escuchó un gemido, al voltear vio que el zombi del hombre estaba de pie, sus uñas eran largas y el color rosado de su piel se había tornado de un color rojo putrefacto. Wesker le disparó con su arma, pero sus disparos no parecieron afectarle en lo más mínimo, el zombi corrió hacia él y sin pensar en otra cosa Wesker le dispara con la escopeta a la cabeza, haciéndosela estallar -¿Qué diablos sucede en esta mansión del demonio?- se preguntó Wesker mientras salía de la habitación.

Mientras tanto Birkin y Jason ocultaban su terror contándose chistes malos, aunque mientras tanto, por sus mentes pasaba la horrible idea de que Wesker no regresaría, cuándo de la nada escucharon que se azotaba la puerta, pensaron que era Wesker, pero esta idea se disipo cuando oyeron el gemido de un zombi, los dos sacaron sus armas y tiraron a quemarropa contra el zombi hasta derribarlo, en ese momento llegó Wesker -Veo que se entretuvieron un rato, por cierto Jason, tu escopeta me sirvió. Después de un rato estas cosa mutan y son inmunes a las balas de una pistola normal y ocupan la potencia de una escopeta- explicó Wesker.

Wesker se aproximó a la puerta y la abrió, salieron a un corredor, caminaron derecho y se encontraron con otra puerta -Diablos, ocupamos otra llave- dijo Jason -¿Y dónde está esa maldita llave?- preguntó molesto Wesker -Esa llave la tiene Hederer, pero está desaparecido- mencionó Jason -¿Dónde se habrá metido ese infeliz?- preguntó Birkin -Aquí estoy- se escuchó la voz de Sven, todos voltearon y se encontraron con Hederer quién traía la llave en la mano -Ahora si nos explicara lo que pasó aquí- dijo Birkin -La verdad es que no se nada- contestó Sven -Note hagas el idiota Hederer- dijo una voz que provenía de la entrada de la mansión, salía de un sujeto con un chaleco antibalas, una ametralladora, pantalón negro, botas militares y una camisa negra que en el hombro llevaba el escudo de Umbrella -Diles lo que pasó Hederer- dijo el sujeto -Está bien, les diré lo que pasó, hubo unos accidentes en los laboratorios, el T-Virus se derramo por todo el lugar convirtiendo a científicos y trabajadores en zombis, los experimentos se escaparon, muchos están en el bosque, otros en la mansión, están en todas partes, se envío a un equipo especial para que controlara todo, pero fracasaron y fueron aniquilados, el único sobreviviente fue el capitán del equipo, este sujeto de nombre Michael Zimbler, sellaron los laboratorios para que no escapara nada, pero ya fue demasiado tarde ya que todos los experimentos salieron, existen pocas probabilidades de que salgamos con vida- dijo Sven -No importa, lucharemos hasta el final- dijo Jason, Birkin se aproximó a Sven y le quitó la llave, luego fue a la puerta que daba al jardín, la abrió y dijo -Vamos todos- y todos salieron por esa puerta.


Capitulo V.- La zona de penumbra

Ahora se encontraban en una pequeña bodega -Les daré un consejo a todos ustedes para que puedan sobrevivir- dijo Michael -si alguna vez se ven en una situación de peligro, donde sus vidas estén en juego, deben seguir algunas reglas para sobrevivir. Nunca miren atrás. No piensen mucho en sus actos. Jamás duden en correr si creen que ya no hay salida. Y sobre todo griten si creen que han caído en el terror absoluto. Al fin y al cabo nadie te oirá gritar mientras esas criaturas te devoran. Recuerden que sus temores pueden tomar cualquier forma y que esas apariciones en tu mente pueden llevarte a la locura, o a sentir el verdadero miedo- concluyó Michael hablando en una forma muy especial, en ese momento todos pensaron que se había vuelto loco.

En la bodega en la que estaban había dos puertas -¿Por dónde es, Hederer? ¿Qué puerta nos lleva a la residencia?- preguntó Wesker a Sven mientras lo tomaba del cuello -Es esa de enfrente, y por favor suéltame- dijo Sven tartamudeando. Wesker se dispuso a abrir la puerta que los condujo a un jardín con una puerta de rejas enfrente y un elevador a la izquierda había dos cerberus, Michael soltó las balas de su ametralladora contra ellos matándolos fácilmente -Podemos seguir- dijo sonriente Michael -Tendremos que bajar por aquel elevador- dijo Sven mientras se acomodaba los lentes. Los cuatro caminaron hacia el elevador, Birkin lo accionó y bajaron hacia otro jardín, ahí se encontraban cuatro Hunters, Sven gritó mientras se agarraba de los barrotes del elevador, Jason apunto a un Hunter en la cabeza con su escopeta y soltó un disparo haciéndole trizas la cabeza, los otros tres Hunters salieron corriendo, se ocultaron para esperar el momento adecuado para matar.
Mientras tanto Sven accionó el elevador y se dispuso a atacar -Jason, alcanza a Hederer, el es el único que puede sacarnos de éste maldito lugar, toma el elevador de enfrente- gritó Michael mientras buscaba a los Hunters.

Sin pensar en otra cosa Jason corrió y tomó el otro elevador pero antes de que llegara, un Hunter saltó hacia él, pero Jason soltó una bala lanzándolo enfrente de Wesker y Michael, Michael descargó su ametralladora contra el monstruo mientras Jason tomaba el elevador. Jason subió y encontró a Sven tratando de abrir la puerta de la bodega, Jason lo tomó y lo arrojó al piso -¿Qué trata de hacer Hederer? ¿Trata de dejarnos solos?- preguntó Jason, en ese momento la puerta de rejas salió volando, ambos voltearon y vieron un monstruo, muy alto que llevaba una gabardina puesta y en su mano derecha llevaba el cuerpo de un soldado. El monstruo arrojó al soldado que llevaba en las manos y empezó a correr hacia Jason y Sven, los dos se tiraron al piso antes de que el mounstro les diera un puñetazo, el monstruo derribo la pared de la bodega, volteó hacia con ellos y abrió la boca soltando un gemido, entonces Jason aprovechó y le metió la escopeta a la boca y de un disparo tiró al monstruo al piso -Hay que irnos antes de que vuelva a despertar- dijo Sven -¿Pero que dice?- preguntó Jason -olvídelo- masculló Sven.
Los dos bajaron y se encontraron con Michael y Wesker quienes ya habían eliminado a todos los Hunters. Wesker se aproximó a Sven y lo tomó por la camisa -Vuélvanos a querer dejar y lo mataré yo mismo- dijo Wesker enfurecido -Muy bien, no lo dejaré mas, por cierto la residencia se encuentra cruzando esos corredores de allá- dijo Sven.

Mientras caminaban, Jason les iba contando de su encuentro con ese monstruo de arriba, todos sentían el miedo corriendo por sus venas, palpitando en su corazón, sabían que en cualquier momento podrían morir. Por fin llegaron a la puerta que los llevaría a la residencia. A un lado de la puerta estaba un zombi con uniforme de guardia de seguridad que portaba una escopeta en la mano. Birkin le dio un balazo en la cabeza que acabó con el zombi, después le quitó la escopeta.

-Bien ahora solo nos queda entrar a la residencia y tomar las medallas, vamos- dijo Birkin mientras abría la puerta.

Capitulo VI.- Bienvenida sangrienta

Todos entraron a la residencia, se veía muy sucia, todo estaba muy desordenado y daba un aspecto completamente macabro. Wesker le apuntó en la cabeza a Hederer -¿Dónde están las malditas medallas?- preguntó Wesker -Están en la habitación de gallery en este lugar, antes ocupamos un diamante que abre el libro donde se encuentran, ese diamante la tiene un tipo llamado John Darling, esta es su habitación, de seguro la encontraremos ahí- dijo Sven. Entraron a la habitación y lo primero que vieron fue un tipo colgado.

-Jhon se suicidó, peor porque... bueno no importa, el siempre llevaba el diamante colgado en el cuello. Tomen, usen esta silla para que lo descuelguen y le quiten el collar- dijo Sven. Michael subió a la silla y lo empezó a descolgar; en cuánto le deshizo el nudo, el cadáver despertó y se abalanzó contra Michael tumbándolo de la silla. Nadie reaccionó en ese momento, sólo Michael quién se alcanzó a zafar del zombi, se levantó y le reventó la cabeza de una pisada; -Estuvo cerca- dijo Michael. Hederer caminó hasta el cuello en busca del collar, se agachó y lo tomó -Este es el collar, ahora tenemos que ir por las medallas- dijo Hederer. Los cuatro salieron y se encontraron con un solo zombi al cual eliminaron fácilmente.

-Debemos buscar las medallas- dijo Sven -Hederer tiene razón, debemos ir por las medallas- dijo Wesker. Los cuatro se dirigieron al cuarto de gallery. Después de exterminar algunos zombis, llegaron al gallery, en este cuarto había una mesa llena de instrumentos raros y sustancias, en el piso había científicos muertos, uno de los científicos tenia en su mano una lanza granadas -Por fin un arma decente- mencionó Wesker mientras la tomaba rápidamente. Sven se metió a otra habitación, todos lo siguieron; Esta habitación era pequeña, sólo tenía un librero y una cama en la que descansaba un cuerpo sin vida. Birkin le disparó en la cabeza -Por si las dudas- mencionó con una sonrisa en el rostro.
Sven tomó dos libros del librero y los abrió con el diamante y sacó las medallas del lobo y del águila, -Ya nos podemos ir de aquí- dijo Sven.

Capitulo VII.- Escape de la Mansión

Los cuatro regresaron de la residencia a la mansión, llegaron al salón principal y bajaron por un pasadizo; antes de llegar al cuarto del sarcófago escucharon unos gritos -Lisa- masculló Sven asustado -Sea lo que sea mi lanzagranadas se encargara de esa cosa- dijo Wesker en tono confiado. Al llegar a la zona del sarcófago vieron que Lisa estaba golpeando el sarcófago -¡Madre!- repetía Lisa.

Lisa volteó a verlos, todos empezaron a dispararle pero no le sucedía nada, sólo gritaba y sacaba sus tentáculos, Wesker le disparó con su lanzagranadas pero Lisa saltó un par de metros de alto esquivando la bala. Lisa cayó sobre Michael y lo tiró al piso, dónde lo empezó a golpear con sus cadenas, Wesker aprovechó para dispararle, el impacto fue tal que lanzó a Lisa contra el sarcófago. Ésta se levanto y se lanzó contra Wesker y con un solo golpe lo lanzó al suelo. Sven tomó una piedra grande y le pegó a Lisa, quitándosela de encima a Wesker, le volvió a lanzar la piedra y Lisa retrocedió casi cayendo al abismo, entonces Sven le lanzó de nuevo la piedra, lo cuál la hizo caer pero no por completo, aún seguía sostenida del borde, Wesker se levantó rápidamente -Déjeme esto a mi Hederer- dijo Wesker, quién le apuntó a Lisa y antes de que ella pudiera subir, el le disparó haciéndola caer al abismo.
-Tenemos que proseguir a los laboratorios- dijo Birkin.

Todos bajaron, Michael se encontraba muy herido, ya que Lisa le había golpeado con bastante fuerza. Hederer puso las medallas en la fuente y toda el agua se drenó; ya que iban a bajar, el monstruo que atacó a Jason y a Sven apareció, Wesker descargó su lanzagranadas sobre él, pero el monstruo era muy resistente, de su mano sacó un tentáculo y tomando a Wesker del cuello, lo estampó contra la pared. Michael le empezó a disparar al monstruo con su ametralladora -Vayan a los laboratorios, yo me encargaré de matarlo- gritó Michael. Michael llamó la atención del monstruo, esta criatura se acercó a él y lo tomó del cuello, lo levantó y lo empezó a ahorcar, Michael sacó una granada, la puso frente a él y dijo sus últimas palabras -Morirás junto a mi monstruo- accionó la granada y los dos estallaron. Michael y el monstruo murieron en la explosión.

-Gracias Michael- dijo Wesker -Tendremos que ir a los laboratorios- dijo Jason. Todos por fin se dirigieron a ellos, la pesadilla estaba a punto de terminar.


Capitulo VIII.- La ultima jornada

Ahora solo quedaban cuatro, Wesker, Birkin, Jason y Sven. Los cuatro bajaron las escaleras y llegaron al cuarto principal dónde se encontraban las cinco puertas -Tenemos que mandar la señal de rescate- dijo Birkin -El cuarto de comunicaciones está por aquí- dijo Sven y los llevó al cuarto, ahí se encontraban tres zombis -Estas cosas están por todos lados- dijo Jason mientras los eliminaba con la escopeta. Sven se sentó y mandó la señal de rescate -Nos están buscando, dicen que tenemos que mandarles una señal para que nos localicen y puedan llevarnos fuera, ahora por favor tienen que seguirme- dijo Sven.

En el camino eliminaron zombis desnudos y Hunters. Sven los llevó a una habitación muy grande que tenía al final una jaula de cristal y en ella estaba un monstruo encadenado, esta criatura lucía una vestimenta negra y en la cara tenía una costura, Sven se acercó a una computadora y comenzó a teclear -No nos mostró este lugar cuando nosotros vinimos- dijo Birkin -No les he sido del todo sincero, el Tyrant no es nuestra obra cumbre, estamos trabajando en un proyecto mas poderoso que el Tyrant, su nombre es NEMESIS, lamentablemente este ser no ha sido terminado, estamos trabajando en él y este sólo es el prototipo. Este monstruo es mi vida y no permitiré que lo exterminen cuando Umbrella destruya la mansión. Tengo que liberar a este ser- dijo Sven -Te has vuelto loco Hederer, no pensarás liberar a la criatura con nosotros adentro... ¿o sí?- dijo Jason, Sven soltó una carcajada y presionó un botón en la computadora.

El monstruo fue liberado de las cadenas, soltó un gruñido y de un puñetazo rompió el cristal, de un salto, cayó frente a Sven -Mátalos, mátalos- gritó eufóricamente Sven, la criatura volteó a ver a Sven, lo tomó por la cabeza y lo levanto -Se supone que debes obedecerme- gritó Sven, el monstruo aplicó mas fuerza y destrozó la cabeza de Sven -Esta cosa nos va a matar- gritó Jason. Los tres que quedaban le empezaron a disparar, pero la criatura no sufría el más mínimo daño, el prototipo de NEMESIS corrió hacia Jason y de un puñetazo lo atravesó -Esa cosa mató a Jason- gritó Wesker, después disparó con su lanzagranadas, pero el monstruo sólo retrocedió algunos pasos -Demonios, ya sólo me queda una bala de lanzagranadas- le dijo Wesker a Birkin.

El prototipo de NEMESIS corrió hacia Wesker, pero éste disparó su última bala hacia el rostro del monstruo dejándolo temporalmente ciego, el monstruo se agarró la cara con las manos y empezó a lanzar fuertes quejidos -¡Corre Wesker! Aprovecha que está ciego- gritó Birkin- los dos salieron corriendo, llegaron al salón principal -¿Recuerdas que puerta nos lleva al helipuerto?- preguntó Wesker -Ésta es- contestó Birkin; los dos salieron corriendo, subieron las escaleras y se metieron al elevador.


Capitulo IX.- El absoluto

Por fin Wesker y Birkin llegaron al helipuerto -Rápido Birkin, lanza la señal- exclamó Wesker, Birkin asintió con la cabeza y tomó la caja de signal rockets, la puso en el centro del helipuerto y un cohete salió disparado al cielo dando la señal de que ellos estaban en ese lugar -Todo terminara pronto Birkin- dijo Wesker, pero en cuánto terminaba de decir estas palabras, el cuerpo de Jason cayó del cielo, Wesker y Birkin dirigieron sus miradas hacia arriba y ahí estaba el prototipo de NEMESIS, en el techo.

El monstruo ahora era de color rojo y se veía mas agresivo. Dio un salto y cayó frente a Birkin, lo tomó del cuello y lo levantó -Tómala Wesker- dijo Birkin mientras le lanzaba su escopeta, entonces Wesker la tomó y la apuntó justo a la cabeza del monstruo y le dio un disparo, el monstruo arrojó a Birkin contra la pared dejándolo inconsciente, ahora sólo quedaba él, Wesker. La criatura corrió hacia él, Wesker trató de darle un puñetazo pero la criatura lo esquivó, la criatura lo tomó de la camisa y lo levantó. La criatura estaba lista para darle un puñetazo pero Wesker colocó una granada en la boca, la criatura lo soltó mientras trataba de quitarse la granada de la boca. Wesker apuntó a la granada -Por favor que no falle- se dijo Wesker a si mismo mientras una gota de sudor corría por su rostro y el nerviosismo se apoderaba de él, por fin soltó un disparo que hizo explotar la granada en la cara del monstruo, la explosión arrojó al monstruo hacia el piso. La criatura se revolcaba desesperadamente pero pronto se puso en pie, ahora tenía la cara deformada y llena de sangre-

-Es imposible deberías estar muerto- dijo Wesker. La criatura estaba lista para matarlo, le iba a dar un puñetazo cuándo unos disparos lo detuvieron, si, Birkin había vuelto en sí -Muérete maldita cosa- gritó Birkin, la criatura había visto a Birkin; empezó a caminar lentamente hacía el. Entonces se escuchó el inconfundible sonido de un helicóptero, su salvación al parecer había llegado. Wesker y Birkin miraron al cielo y vieron el helicóptero con el escudo de Umbrella. De la puerta del helicóptero salió un tipo con una ametralladora Gatlin, este tipo empezó a disparar contra el monstruo, pero era inútil, esta criatura aguantaba todo -Lánzales la Venom- dijo el piloto al tipo de la ametralladora -Si- contestó el sujeto, tomó un arma que parecía una rocket launcher pero esta era más pequeña y se veía mas electrónica. El sujeto les arrojó la Venom -Úsenla, eso puede matar a lo que sea- gritó el sujeto. Wesker corrió y tomó el arma -Maldita cosa, voltea- gritó Wesker al prototipo de NEMESIS, el monstruo volteó, Wesker soltó un disparo, la bala era cómo un misil, sólo que en la punta tenía una aguja muy filosa. La bala se estrelló contra el pecho del monstruo. La criatura empezó a quejarse, se le empezaron a hacer heridas por todo el cuerpo, comenzó a sangrar, después se empezó a inflar y terminó por explotar.

El helicóptero aterrizó en el helipuerto, Wesker y Birkin se subieron a él. Poco a poco el helicóptero se fue alejando de la mansión, -¿Qué fue lo que pasó?- preguntó el tipo que les lanzó la Venom -Sólo un pequeño accidente- contestó Wesker, el y Birkin se recostaron en sus asientos. Sólo quedó un pensamiento en la mente de Wesker, que algún día regresara a la mansión y se apoderara del Tyrant. El helicóptero se alejó por fin de la mansión, dejando atrás la pesadilla. Wesker y Birkin demostraron que fueron lo suficientemente capaces de sobrevivir.

FIN



PD: Espero lo disfruten compañeros de U.T.C
Atte: Junior Farias (Equipo de investigacion y desarollo)